Estas sesiones son muy especiales porque, durante una hora, ofrecemos la posibilidad de que podáis venir a clase con vuestras criaturitas. Entendemos que la conciliación es una utopía y que tampoco queréis (y a veces no podéis) separaros de ellas así que, una vez a la semana, tenéis la oportunidad de mover un poquito el cuerpo, compartir la experiencia con otras mamis y encontrar ese ratito para retomar la actividad. Aunque NO es una clase de recuperación posparto (todo se andará) sí necesitaremos que os hayan dado el OK médico. Lo ideal es que, antes de volver a los hábitos de antes del embarazo, paséis por la consulta de una fisioterapeuta de suelo pélvico y que os valore para así poder disfrutar plenamente de la actividad y con la tranquilidad de que está todo bien.
Pilates adaptado para mejorar movilidad y bienestar en personas con limitaciones.
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